La mayoría de las mujeres, tenemos que lidiar todos los meses con un delicado equilibrio hormonal, que es clave para la salud y que puede tambalearse cuando somos adolescentes y comenzamos con la menstruación, estamos embarazadas, estamos atravesando la menopausia, empezamos a tomar o cambiamos de método anticonceptivo o tenemos que enfrentarnos a cambios estresantes en la vida.
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Cuando tenemos un desajuste hormonal hay una serie de síntomas que todas podemos interpretar como estados de ánimo cambiantes, hinchazón de tripa, cabello graso, insomnio, malhumor y ansiedad.
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Durante el síndrome menstrual, que es el momento en que más descontrol hormonal podemos tener, hay una serie de hábitos que podemos adoptar y que nos ayudaran a equilibrar las hormonas naturalmente:
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1. Cuidado con lo que bebes
La cafeína, el alcohol y las bebidas azucaradas y energéticas, pueden causar estragos en las hormonas al estimular el exceso de cortisol y afectar la función ovárica, y las hormonas que producen.
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En su lugar, toma agua mineral o de coco y, cuando necesites energía, prepárate una taza de té verde.
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2.Evita el azúcar
El azúcar puede alterar considerablemente tu equilibrio hormonal. Aumenta la insulina, otra hormona que, si no se regula estrictamente, puede conducir a la reducción de la producción de otras hormonas necesarias para el equilibrio y la ovulación, lo que resulta en infertilidad.
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Come arándanos.
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3. Come más verduras
Y particularmente de verduras crucíferas, como el brócoli y la col rizada. Pueden aumentar el metabolismo el estrógeno porque tienen un alto contenido de indol-3-carbinol, un compuesto que también puede ayudar a disminuir esos síntomas "hormonales".
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4. Toma semillas de lino
Ricas en lignanos, fibra y ácidos grasos omega-3 esenciales, las semillas de lino pueden apoyar la salud cardíaca y mejorar los niveles de azúcar en sangre. Y ayudan a equilibrar la proporción de estradiol/progesterona, uno de los secretos del equilibrio hormonal.
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5. Toma maca
Ayuda a aliviar los síntomas de la menopausia como los sudores nocturnos y los sofocos, pero también es una solución natural y segura para mantener una libido saludable.
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6. Toma Vitex Agnus
Clasificado como fitoprogesterona debido a su potencial para apoyar naturalmente la producción de progesterona en el cuerpo, reduce los síntomas del síndrome premenstrual al estimular el equilibrio hormonal.
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7. Usa suplementos naturales
La vitamina C, el ácido pantoténico (también conocido como B5), la fosfatidilserina, el ginseng siberiano y la rhodiola rosea, son suplementos naturales que pueden ayudar a recuperar el equilibrio hormonal porque son los llamados adaptógenos, unas sustancias que ayudan a equilibrar la respuesta de nuestro cuerpo al estrés, dotandonos de energía y resistencia física.
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8. Di adiós al estrés
Tenemos tendencia a dejar que nuestra salud decaiga cuando estamos estresados, ya sea que aumentamos nuestra ingesta de alimentos procesados o reducimos nuestro tiempo de sueño.
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Pero, es en esos momentos, cuando más necesitas cuidar de ti misma. El estrés, a menudo genera un excedente del cortisol, que, en última instancia puede llegar a convertirse en fatiga suprarrenal, una condición caracterizada por fatiga, debilidad del sistema inmune y una falta general de resistencia, que puede dañar aún más tu equilibrio hormonal.
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Tómate el tiempo para darte un baño relajante, salir a la naturaleza, asistir a una clase de yoga o simplemente túmbate en el sillón, y no sientas ni poco de remordimiento por ello.
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9. Haz ejercicio
Mejora la circulación, libera endorfinas que te hacen sentir bien, mantiene el peso bajo control y refuerza la inmunidad y la salud del corazón.
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Pero además, tiene un gran efecto sobre el cortisol y la adrenalina, dos hormonas, frecuentemente relacionadas con el estrés, que pueden conducir a un desequilibrio hormonal.
El yoga, puede aumentar la producción de GABA, un neurotransmisor relacionado con la depresión y la ansiedad, dos de los problemas más comunes en el desequilibrio hormonal.
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10. Come más orgánico
Si comes carne, trata de hacerlo como moderación y procura tomar animales orgánicos y libres de hormonas. Esto limitara tu exposición a los xenoestrógenos, toxinas ambientales, que se encuentran en los pesticidas (así como en algunos productos de cuidado personal), que pueden imitar el estrógeno y crear un caos hormonal.